Fundación Moscaico Down IAP: Comprometidos con la inclusión

¿Alguna vez te has preguntado lo valioso que es realizar tus actividades cotidianas? Levantarte, elegir la ropa que te pondrás, decidir qué desayunar, tomar el transporte o tu vehículo y llegar a tu trabajo o escuela; ¿suena maravillosa verdad? pues este es un privilegio que no todos tenemos, las personas con Síndrome de Down, en su mayoría viven sin poder elegir lo que quieren hacer o no hacer, esto es porque les han sido negadas las oportunidades de por lo menos intentarlo.

El día de hoy quiero hablarles un poco desde mi experiencia como directora de la Fundación Mosaico Down IAP, la cual atiende en el ámbito educativo a personas con esta condición, con la particularidad que son de escasos recursos.

En este caminar por este mundo de la discapacidad he descubierto que las familias son los principales agentes de cambio para transformar y mejorar el futuro de las personas con alguna discapacidad, en conjunto con el resto de la sociedad por supuesto, la forma es simple, dejar que las personas que tienen esta condición se equivoquen, dejarlos que elijan que ropa ponerse desde pequeños,  dejar que lo intenten una y otra vez hasta que lo logren, aceptar su llanto de frustración por no poder lograr su objetivo y acompañarlos a cada paso, interviniendo solo cuando sea necesario, el regalo más grande que le podemos dar a estos chicos desde niños es la independencia y el valor de luchar, porque la vida para ellos como para cualquier otra persona no es sencilla y las familias no estarán el resto de la vida para resolver sus necesidades y si así fuera que triste sería para todos, porque en ello va implícito el placer de la experiencia de equivocarse, pero también de acertar y en consecuencia de vivir. 

Algo que he aprendido en estos años, es que al forzarlos a que hagan las cosas por su cuenta, les estas dando el voto de confianza más grande, les estas diciendo “Tú puedes”,  orillarlos a que lo intenten, escucharlos cuando se enamoran, ver sus sonrisas por que han logrado algo, ver esa luz en sus ojos y que sin hablar pero con una seña te hagan saber que lo han hecho ellos, es el mejor regalo que tienes para entregarles, porque al hacer esto les das herramientas para desarrollar en ellos independencia, confianza y autoestima.

Es por ello que la fundación que dirijo, tiene la Carrera Técnica en Gastronomía, porque creo en ellos y creo que son capaces de aprender y lograr lo que se propongan, y la verdad no me equivoque, al contrario, ellos me enseñaron que los límites son mentales, por ello vi la urgencia de generar espacios para que los chicos practicaran sus saberes y por otro lado contar con un espacio laboral digno y acorde a sus deseos, de estas dos necesidades nacen dos proyectos: “Catering con causa” y “El sueño de Frida Kahfé” el primero de ellos es donde nuestros chicos realizan sus prácticas profesionales y reciben una beca por ello, el segundo es el escalón más grande, donde los chicos ya por fin tienen un empleo con un sueldo competitivo y todas las prestaciones por ley.

El primer impacto que sentí al verlos en Catering con su uniforme y su sonrisa es uno de los regalos más importantes que he tenido en mi vida, y ahora verlos con sus bonitos uniformes en la cafetería me llena de mucho orgullo, de felicidad, pero también de mucha responsabilidad. 

Sin duda, hoy puedo decir sin temor a equivocarme que las personas con Síndrome de Down, pueden ser independientes, pueden lograr sus sueños, pero también reconozco que es tarea de todos luchar para que esto suceda, siendo empáticos, siendo perseverantes, siendo tercos, no desistiendo, buscando ayuda, las familias no están solas, hay muchas personas, instituciones y empresas que vamos caminando al lado suyo, que no nos cansaremos de decir si se puede, que estamos demostrando que hay un lugar en el mundo para ellos, que pueden explorar diversos campos de la vida, que ella no se reduce a 1 o 5 actividades, hay mundo esperándolos, esto no es cuestión de 1 cromosoma de más solo es cuestión de dar un espacio a la oportunidad, la cual por cierto es también deseo de ellos, porque me lo han dicho, quieren aportar dinero a sus hogares, quieren comprarse sus cosas, quieren tener una familia, quieren ser independientes, elegir y en consecuencia y quizá sin decirlo explícitamente, quieren ejercer ese gran regalo que es la libertad, sin duda, el otorgarla con responsabilidad es lo mejor que estaremos aportando a sus vidas y en consecuencia al resto de la sociedad.

Facebook
Twitter
WhatsApp

Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario a través de su navegación.