Cuando pasan cosas buenas y tengo la oportunidad de estar involucrado y cooperar con al menos un grano de arena, es regalo de Dios. Eso es Fundación Inclúyeme para mí.
La Fundación es esa institución que ayuda desinteresadamente a algunas personas en forma directa, las menos, y muchas más en forma indirecta a través de la transmisión de conocimiento y experiencias por medio de diferentes canales, en uno de los cuales tengo el privilegio de participar.
El conocimiento, siendo un valor que se acrecienta al ser compartido y en este caso, favoreciendo a mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad intelectual y dentro del espectro autista, es invaluable en manos de quien lo posee y que, además, puede y aprende a ponerlo en práctica en beneficio de las familias y la gente involucrada con dicha persona.
Cuando se planteó la posibilidad de comunicar a través de un blog la información generada y las experiencias vividas, ambas por la labor diaria en los centros de trabajo, con las familias y en los departamentos donde viven los muchachos con discapacidad intelectual, beneficiarios del programa, y transmitir ese conocimiento a tal vez miles de familias que dentro de sus integrantes hay alguien con discapacidad, creí que si esto ayudaba a mejorar la calidad de vida de aunque fuera una persona y/o familia, todo este trabajo valdría la pena.
La satisfacción de ser creador del sitio web de Fundación Inclúyeme y co-creador del proyecto del blog como canal para la transmisión de dicho conocimiento, es de un valor incalculable. Con este esfuerzo hemos podido lograr que cada vez más familias y personas reciban apoyo de información y orientación con la seguridad de que si se quiere y se trabaja en ello, es posible.